lunes, 24 de noviembre de 2014

Una victoria que plantea muchas dudas (Jacksonville Jaguars 3, Indianapolis Colts 23).


Duelo divisional en el que, tras un arranque lento, los Colts consiguieron imponerse y terminaron ganando 23 a 3 ante unos Jaguars que se hunden en lo más profundo de su propio pozo. Los Colts suman una victoria más (7-4) y se afianzan en el primer lugar de la AFC Sur.

Después de una primera mitad para olvidar, los Colts cogieron ritmo y terminaron por dominar en todos los aspectos del juego. Una primera mitad con una defensa que respondió a todo lo que la ofensiva de Jacksonville propuso, pero con un ataque que cometió muchos errores y que mostró unas carencias que ponen de manifiesto que el equipo no es tan grande como algunos imaginábamos.

La victoria de este domingo, sumada a la derrota de los Texans, pone a los Colts en una primera posición muy cómoda dentro de la división y augura un pase casi seguro (crucemos los dedos) a la primera ronda de playoffs. Después de la paliza sufrida a manos de los Patriots hay que ser realista y olvidarse por el momento de una semilla que le dé al equipo una semana de descanso en postemporada, pero eso no quita que una vez llegados a enero se intente hacer un papel más o menos digno.

Si algo nos queda claro tras el partido de ayer, es que estos Colts tienen que trabajar muchísimo si quieren se les tome en serio a partir de ahora. No sirve sólo con tener a uno de los mejores quarterbacks de la liga. No sirve contar con varios jugadores que, uno por uno, son de los mejores en sus puestos. No sirve de nada, porque llega un Equipo (con mayúscula) como los Patriots y te hace casi 250 yardas de carrera y te mete 42 puntos. Se vive de tapar huecos con parches y de las genialidades de tres o cuatro estrellas, y eso en enero no sirve absolutamente de nada. Los Jaguars son los Jaguars y no supieron aprovechar el pésimo inicio de partido de los Colts, pero hay muchos equipos que sí hubieran sabido hacerlo.

Los Jacksonville Jaguars son un equipo horrible. Ayer demostraron que no tienen mucho que ofrecer y que si quieren salir de la espiral de derrotas en la que se ven sumergidos, tendrán que cambiar radicalmente la filosofía con la que se enfrentan a esta liga, pero eso sí, tienen una piscina muy chula en su estadio. No sé cuál es la solución para este equipo, no sé si deberían plantearse una mudanza y empezar de nuevo. Los Angeles tiene muchas ganas de tener de nuevo un equipo en la NFL y a lo mejor no sería una tontería intentar reestructurarse así. Jugaron muy fuertes en defensa en la primera mitad, pero el ataque no supo aprovecharse de ello. Forzaron varios turnovers y por un momento dominaron por completo a una de las mejores ofensivas de la liga. En la segunda mitad, una vez que la ofensiva local despertó, los Jags se vinieron abajo por completo y pareció que jugaban con apatía, con ganas de pasar el trámite y pensar en el próximo draft.

Un ataque que nunca tuvo una oportunidad contra la defensa de Indianapolis. El resultado final lo dice casi todo. La defensiva aprovechó la mediocridad de Jacksonville y frenó con soltura la carrera y el pase. Nadie niega que los Jaguars son de los peores ataques en la liga, pero eso no quita para que se jugara bien y no se permitiera que el rival avanzara por el campo. Hasta 4 veces se tiró al suelo a un Blake Bortles que estuvo bastante flojo y al que no acompañó el resto del ataque. Vontae Davis, que jugó un partido tremendo, lo interceptó y a punto estuvo de marcar un TD. Se provocó un fumble que se recuperó. La defensa contra la carrera cumplió, permitiendo un total de 80 yardas desde scrimmage, 24 de ellas del propio Bortles. Se hicieron las cosas bien y, a pesar de jugar contra la ofensiva que jugaron, dieron muy buena impresión. LaRon Landry salió al campo dispuesto a cerrarnos la boca a todos los que le hemos criticado brutalmente y jugó un gran partido con un sack y medio y unos cuantos tackles.

El ataque sufrió muchísimo durante la primera mitad. Por un momento pensamos que el partido se iba a complicar. Andrew Luck no jugó bien. Rompió la racha de partidos consecutivos con más de 300 yardas y terminó con unas estadísticas algo mediocres: completó 21 de 32 pases lanzados para 253 yardas y un TD. Por tierra acumuló 49 yardas más. Tardó en cogerle ritmo al partido y cometió un par de errores imperdonables. El segundo fumble que le provoca la defensa de los Jags es principalmente culpa suya.

T.Y. Hilton volvió a ser una pieza fundamental de este ataque, acumuló 122 yardas de pase y marcó un TD que celebró en honor de su hija recién nacida. Participó en una jugada de carrera en la que sumó 15 yardas.

Se sintió muchísimo la ausencia de Dwayne Allen. Ni Coby Fleener ni Jack Doyle supieron contrarrestar la pérdida del TE de la universidad de Clemson, que se notó tanto en el juego aéreo como sobre todo en el trabajo de línea que hace, bloqueando y protegiendo al QB.

El juego de carrera resucitó de la mano de un Dan Herron que consiguió 65 yardas en 12 acarreos y promete mucho, pero que aún tiene todo por demostrar. Trent Richardson cumplió con un aporte modesto y consiguió 42 yardas y un TD. El hueco que deja Ahmad Bradshaw es enorme, se echa mucho de menos su aporte al juego aéreo, sus bloqueos y su espíritu de lucha, pero ayer el juego terrestre aprobó con un suficiente+.

La línea ofensiva sufrió muchísimo. El lado derecho (Joe Reitz y Hugh Thornton) fue un coladero y vimos a una de las peores líneas de los últimos tres años. Sin duda, a día de hoy, lo peor de este equipo. ¿De qué sería capaz este ataque con una OL competente?

Los equipos especiales fueron de lo mejor de toda la noche. El fichaje de Josh Cribbs parece darle un empuje más a uno de los puntos fuertes del equipo. Estuvo tremendo en un par de retornos. Es una pena que anularan el TD que marcó por culpa de una falta estúpida que ni siquiera favoreció la anotación.

Se acumularon fallos y turnovers, ¡pero como son los Jaguars no importa! Y ese es el problema, que no todos los equipos son los Jaguars. Se cometieron muchos errores, pero es cierto que se supo ajustar en la segunda mitad y que la defensa supo responder.

A partir de ahora hay que apretar el acelerador. Cada vez queda más cerca enero, y un récord de 7 victorias y 4 derrotas no deja mucho espacio al error. Quedan partidos en su mayoría "asequibles". La semana que viene se juega en casa contra unos Washington Redskins que no están en su mejor momento, pero que intentarán dar toda la guerra que puedan; la siguiente se visita a unos Browns que han crecido mucho este año; los siguientes rivales serán Texans, Cowboys y Titans; pero lo que más nos asusta no son los partidos que quedan de temporada regular, lo que nos asusta es lo que está por venir más tarde. Winter is coming.





Fotografía: A.J Mast

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