Partido complicado como pocos el que tienen por delante los Colts este domingo en primetime. Viajarán a Pittsburg a enfrentarse con unos acereros que tienen el mismo récord de victorias y derrotas, pero que han dado mejores sensaciones este año.
El empuje de los Texans, que llevan una racha de cuatro partidos ganados y que también están 6-5, obliga a los de la herradura a intentar conseguir la hazaña de sacarle una victoria a los señores de acero en Heinz Field, feudo prácticamente inexpugnable para ellos. Entre otras cosas, el antecedente del enfrentamiento entre ambos equipos el año pasado, con un resultado horrible para los Colts, hace que sean los de Pittsburg los que partan como favoritos en un encuentro que promete ser espectacular.
Los Steelers han sufrido este año con las bajas de Ben Roethlisberger. Superado con éxito el protocolo de conmociones cerebrales, ha estado disponible para entrenar y es más que probable que lo veamos sobre el emparrillado en el Sunday Night Football. Con la estrella Le'Veon Bell fuera de juego, DeAngelo Williams se ha hecho con el control absoluto del backfield de los Steelers. Y no lo ha hecho nada mal. Big Ben cuenta con dos receptores espectaculares como son Martavis Bryant y, sobre todo, Antonio Brown.
Con semejantes armas en ataque, y una defensa que puede salvar el día y responder en determinados momentos, es posible que Mike Tomlin quiera explotar el talento que tienen sus jugadores por arriba para quemar a la secundaria de los Colts. Si son capaces de establecer el juego de carrera, no sería raro ver un desastre similar al del año pasado.
Los Colts no son los mismos que los de la última temporada. Con Matt Hasselbeck bajo centro el ataque se ha vuelto más conservador, más cerebral, y mucho más resolutivo que al inicio de temporada bajo el control de Andrew Luck. Hasselbeck ha estado jugando tan bien, que a sus 40 años ha levantado suspicacias a la entropía, y ha tenido que pasar un test de drogas "aleatorio".
La secundaria de los Steelers no es particularmente buena, por lo que sería de esperar que tanto Hilton como Moncrief tuvieran oportunidades a la hora de conseguir primeros downs, yardas y anotaciones. Con Antonio Brown al otro lado, la competición está asegurada. Él y T.Y. Hilton son amigos de la infancia y han compartido su afecto en público en multitud de ocasiones. La prensa estadounidense ha llegado a calificar su relación como un auténtico bromance.
La semana pasada vimos resucitar el juego aéreo de manos del bueno de Hasselbeck y fue suficiente para ganarle a los Bucs. Contra los Steelers no será suficiente. El juego de carrera tiene que mejorar sustancialmente. Frank Gore no lleva una temporada especialmente mala. Tiene sus momentos. La lesión para toda la temporada de Ahmad Bradshaw hace que Boom Herron se haya convertido una vez más en el segundo RB y que Zurlon Tipton haya sido reclamado de waivers. Los dos saben lo que es llevar el peso del juego de carrera de los Colts, pero la pérdida de Bradshaw es una lástima, ya que representaba un peligro constante, sobre todo recibiendo pases.
La ofensiva tiene que mantenerse limpia de turnovers y saber anotar una buena cantidad de puntos, pero el partido será para la defensa. A pesar de las bajas y de las estadísticas, esta unidad está demostrando semana a semana mucho más de lo que se esperaba de ella. Si la secundaria está al máximo y Vontae Davis puede anular, si no a Brown, al que se ponga en su lado, el pass rush puede tener una oportunidad de cortarle las alas a Roethlisberger. La defensa contra la carrera tiene que evitar a toda costa que el partido se convierta en un festival de DeAngelo Williams.
Mike Addams regresará al campo, pero no así Jerrell Freeman. Veremos cómo afecta su baja al rendimiento contra TEs y corredores recibiendo desde atrás.
Este domingo la defensiva Colt tiene la oportunidad de despejar las dudas de una vez por todas, contra una de las ofensivas más productivas de la competición. Si son capaces de minimizar el daño que pueden hacer Williams o Brown y crean algún turnover, las cosas se pondrían fáciles para regresar de Pittsburg con una victoria.
Los Steelers son un equipo serio y muy disciplinado. Comandados bajo la batuta del valiente Tomlin han sabido mantener sus aspiraciones a postemporada abiertas en una división en la que conviven con los exitosos Bengals. Son favoritos por algo. Si los Colts quieren tener alguna posibilidad de ganarlos tendrán que salir al campo con todo y no cometer apenas errores.
Este es posiblemente el partido más complicado de lo que resta de temporada. Ganarlo o perderlo y la forma de hacerlo pueden esclarecer algo el futuro. Más allá de los Steelers quedan los duelos divisionales y los Dolphins. Jaguars y Titans no deberían dar muchos problemas, pero los Texans están muy fuertes y es posible que el campeón de la AFC Sur se decida jugando contra ellos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario