El último clavo en la tumba de Peyton Manning (Divisional Round: Indianapolis Colts 24, Denver Broncos 13).

Tras la victoria de los Indianapolis Colts por 24 a 13 frente a los Denver Broncos, sacamos dos cosas en claro: que los Colts tienen equipo, y que Peyton Manning está acabado.

Dicen que rectificar es de sabios y, aunque con cierta tristeza, tenemos que reconocer que nos habíamos equivocado de lleno con el QB de los Broncos. Pensábamos sinceramente que el genio aún tenía football en sus manos, que su capacidad estratégica supliría a la física, y que lo que había ocurrido durante las últimas jornadas de la temporada simplemente respondía a una reserva de energías para poder explotar en postemporada. Nada más lejos de la realidad. Ayer por la noche en el Invesco Stadium at Mile High, los Colts fueron el último clavo en la tumba de Peyton Manning. El veterano QB salió al campo despistado y con cara de no tener ninguna gana de estar en su lugar en aquel momento. Jugó uno de sus peores partidos como profesional y ya se rumorea que podría retirarse definitivamente. Cuando tras el encuentro le han preguntado que si puede decir que va a regresar en 2015, ha contestado que no, que no podría decirlo. Es el fin de una era. Después de haber resucitado tras la lesión, nos negábamos a enterrar del todo a un jugador que para muchos ha sido todo un referente en este deporte. No hay más que repasar el vídeo de su reciente actuación para darse cuenta de que, se retire o no, nunca más veremos jugar al Peyton Manning que conocíamos. Se acabó. It's over.

Sorpresa mayúscula en Mile High que sepulta definitivamente a un genio, pero que al mismo tiempo encumbra a un equipo en el que nadie había creído hasta ahora. Todo el mundo disfruta de una buena traca de fuegos artificiales. Todo el mundo ha destacado la calidad y buen hacer del QB llegado de la universidad de Stanford a Indianapolis. Pero a la hora de la verdad, nadie confiaba en que hubiera equipo más allá de Andrew Luck. Ayer se demostró lo contrario. Las piezas funcionaron bien engrasadas. Los planteamientos fueron serios. La actitud la correcta. Y la actuación del bloque muy sólida. Se cometieron errores, pero se salió a ganar a un equipo que parecía infranqueable. Se supo trabajar con inteligencia en defensa y se gestionó un partido casi perfecto en ataque. Los Colts pasaron por encima de los Broncos en prácticamente todos los aspectos del juego, se hicieron con la ronda divisional y con el derecho a luchar por un puesto en el Super Bowl durante la final de conferencia que se jugará la semana que viene.

Como viene siendo habitual en los Colts, tienen un inicio de partido malo. Comienzan en ataque con un drive frenado con un 3 y fuera y a una yarda del primer down. Los Broncos no tardan en contestar por medio de un TD de Peyton Manning a Demaryius Thomas. Un TD que podría haberse quedado en un tres y fuera de la defensa de los Colts si no llega a ser por un estúpido roughing the passer de Arthur Jones. 7 a 0 en el marcador y las redes sociales arden vaticinando una paliza de escándalo.

Tras un arranque de partido desfavorable, los Colts se ponen el mono de trabajo y se dedican a parar al ataque de los Broncos y a sumar puntos en el marcador. Tiene que llegar el segundo cuarto para que, tras un drive eléctrico, Dan Herron marque de carrera el primer TD para los visitantes.

El siguiente ataque de los Broncos es destruido por medio de un fumble de Jonathan Newsome a Manning que recupera Jerrell Freeman. Los Colts comienzan desde la 41 de Denver y culminan otro drive con un TD, en este caso para Dwayne Allen. 14 a 7 para los visitantes, y la esperanza inunda los corazones de los seguidores blanquiazules.

Muestra de poderío defensivo en ambas escuadras durante los últimos minutos del segundo cuarto. Primera intercepción a Andrew Luck, que es calificada por la retransmisión de la CBS como "un mal punt en tercer down". Denver recupera el balón y Peyton Manning lanza un incompleto tras otro hasta que Connor Barth sube tres puntos al marcador por medio de un field goal de 45 yardas.

El tercer cuarto comienza con un tres y fuera para la defensa de los Colts. Andrew Luck coge el balón y tras un drive sostenido en el que abundan las faltas innecesarias consigue anotar otro TD, esta vez con recepción de Hakeem Nicks. 21 a 10 en el marcador y Denver da la sensación de estar sufriendo tanto en defensa como en ataque. Muchos cruzamos los dedos, pero el partido está encarrilado.

Un golpe a Josh Cribbs durante un retorno podría haberle dado la vuelta al partido si los árbitros hubieran mantenido su decisión inicial tras la revisión del vídeo. Parece claro que el jugador cae al suelo antes de que se le desprenda el balón de las manos.

Andrew Luck lanza su segunda intercepción de la noche. Por segunda vez, y en este caso aún más evidente, la repercusión no es mucho mayor de lo que hubiera sido un punt en tercer down que deja a los Broncos en su yarda 24. Manning parece conectar con sus receptores, pero ahora ya es algo tarde. Consigue llevar a su ofensiva hasta la 23 de los Colts, pero allí son frenados sin piedad por la defensiva visitante, reduciendo el daño a un field goal de 41 yardas convertido en 3 puntos.

21-13, y no parece que Denver termine de despertar. El ataque de Indianapolis gasta 8,14 minutos del crono para rematar con otros tres puntos que suben al marcador gracias a Adam Vinatieri. 24 a 13. Los Broncos lo intentan un par de veces más, pero la defensa blanquiazul no permite que haya cambios en el marcador. Termina el partido y algunos aún nos preguntamos si es cierto que los Colts han pasado de ronda.

Se ha sufrido mucho durante este año en defensa, pero gracias a esa misma defensa, se consiguió vencer anoche en Denver. En general se jugó un buen partido, se limitó a una de las ofensivas más temibles a 13 puntos, 267 yardas totales y un ridículo 25% de efectividad en tercer down. Parte del éxito de esta defensiva se basó en la mala actuación que el veterano QB de los Broncos perpetró, se cometieron errores imperdonables, pero se cumplió con el objetivo de dejar seco al ataque de Denver. Se sufrió mucho contra la carrera, y es una de las mayores preocupaciones que debería tener este equipo. La jugada de C.J. Anderson en 4 y 1 es un auténtico desastre. El corredor se zafa de varios placajes y pone en ridículo a la defensa terrestre de los Colts. La secundaria, por su parte, prácticamente anuló el juego de pase. Greg Toller, Vontae Davis y Darius Buttler estuvieron enormes. Destacar también el trabajo defensivo de hombres como D'Qwell Jackson, Jonathan Newsome, Erik Walden o Jerrell Freeman. A pesar de la irregularidad con la que se ha jugado esta temporada, parece que las piezas encajan y todo el trabajo previo comienza a dar resultados.

Andrew Luck jugó un buen partido, pero sin ser lo más destacado de ayer. Supo gestionar el juego y gracias a su talento el equipo ha llegado dónde está, pero el encuentro de ayer lo ganó el bloque. Nadie sobresalió, fue una victoria de grupo, y eso es bueno. El QB completó 27 de los 43 pases que lanzó para 265 yardas, 2 touchdowns y 2 intercepciones. Ambas intercepciones ensombrecen una actuación más que correcta, si bien es cierto que ninguna tuvo un impacto decisivo en el resultado final.

El ataque jugó a lo que mejor sabe hacer, lanzar el balón por arriba. Luck completó pases hasta en 8 objetivos diferentes. T.Y. Hilton cogió 4 recepciones para 72 yardas. Coby Fleener 3 para 49. Fue lamentable la facilidad con la que los Broncos frenaron a jugadores recibiendo detrás de la línea de scrimmage. Dan Herron recibió 8 pases que consiguió traducir en apenas 32 yardas. Luck se apoya mucho en su backfield para lanzar, así que tendrán que trabajar en esas formaciones. Donte Moncrief consiguió acumular 32 yardas con tan solo dos recepciones. Tanto Dwayne Allen como Hakeem Nicks consiguieron sendos touchdowns.

No se puede decir que se jugara mal en ataque, pero el juego terrestre sigue siendo un problema. Por mucho que parezca haber mejorado ahora que se ha apartado del equipo a Trent Richardson, ni Dan Herron ni Zurlon Tipton parecen una solución clara a este problema. Es posible que el año que viene contemos de nuevo con los servicios de Ahmad Bradshaw, pero debido a su fragilidad tampoco es una opción segura. ¿Qué pasará con Vick Ballard? Después de otro año en dique seco no estamos seguros de que la organización vaya a darle otra oportunidad. ¿Se convertirán en realidad los rumores que apuntan a que Frank Gore podría acabar jugando en los Colts? Gore es un súper clase, pero es caro y algo mayor. Más allá de los logros de esta temporada, creemos que el backfield es uno de los puntos en los que el equipo debe fortalecerse.

Parte del problema con el juego terrestre lo ha podido tener también una línea ofensiva que durante este año ha probado hasta con 11 combinaciones diferentes. La línea que hemos visto tanto en Wild Card contra los Bengals, como ayer contra el front seven de los Broncos, ha mejorado sustancialmente respecto al resto del año. A pesar de no haber brillado especialmente abriendo rutas de carrera, han sabido proteger más que correctamente a su QB. Ayer anularon por completo a dos monstruos como son DeMarcus Ware y Von Miller.

Sin contar las dos intercepciones de Luck, se protegió la posesión del balón mucho mejor que en otras ocasiones, aunque es cierto que se plantearon pocas jugadas de carrera (28 acarreos por tierra contra 43 pases lanzados).

Hubo alguna elección de jugada un poco extraña, muy a lo Pep Hamilton, como salir en carrera en un 3 y largo, pero en general las decisiones que ha tomado el cuerpo técnico a lo largo del año y durante el partido de ayer han sido correctas.

Como nota negativa, la cantidad de faltas cometidas en los últimos partidos. La falta de disciplina comienza a ser un problema para este equipo si quiere tener oportunidades de jugar el Super Bowl y ganarlo. El año pasado fue el equipo menos penalizado de toda la liga, ¿por qué se están cometiendo tantas faltas ahora? Chuck Pagano tiene que ponerse serio al respecto y llamar la atención a aquellos jugadores que más veces infrinjan las normas. Es muy frustrante ver lastrada a una ofensiva por una cantidad absurda de yardas de penalización.

Con esta victoria, los Colts mantienen vivas las expectativas de llegar hasta el final. Hagan lo que hagan contra los Patriots en la final de la AFC habrán cumplido su objetivo de este año y con honores. Nadie creía en estos Colts al inicio de la postemporada, y estamos seguros de que ahora más de uno los mirará con otros ojos. Más allá de las genialidades de su QB, han demostrado ser un bloque compacto que sabe ganar partidos importantes contra rivales que, sobre el papel, son superiores. Como sucedió ayer. Andrew Luck le arrancó el testigo generacional a Peyton Manning de las manos con un ojo puesto en Foxboro.

Fotografía: Jack Dempsey.