lunes, 14 de diciembre de 2015

Hasta la vista, baby (Colts 13 - Jaguars 51).



Adiós a la racha de victorias divisionales. Adiós a la oportunidad de dar una buena imagen antes del partido contra los Texans que probablemente decida la división. Los Colts perdieron con todas las letras frente a los Jaguars en un encuentro importante que podría haberles dado la división y el pase a playoffs.

Ni en sus sueños más húmedos, los aficionados de los Jaguars habrían imaginado la epopeya de tintes épicos que protagonizó su equipo. Salieron al campo adormilados y con falta de ritmo, pero los ajustes de medio tiempo, además de una actuación desastrosa de los Colts, hicieron que resucitaran por todo lo alto, dándole a los de la herradura la peor paliza que han recibido en la era Pagano.

No hay que quitarle ni un gramo de mérito a los Jags, pero es que los Colts jugaron como no lo hacían desde 2011. Con poco más de un minuto en el reloj al final del segundo cuarto, los visitantes ganaban 13-3 y, aunque despacio, se planteaba una victoria cómoda. Los de Jacksonville no estuvieron de acuerdo. Le robaron el balón de las manos a Matt Hasselbeck, que tenía la línea de scrimmage en la 34 rival, y anotaron un touchdown, para terminar la primera parte 13-9 (sí, Myers falló un extra point). A partir de ese momento tomaron las riendas del partido y aplastaron sin piedad a los Colts.

Allen Robinson fue eclipsado por Vontae Davis y apenas tuvo participación alguna en el partido, pero entre Allen Hurns y Julius Thomas aprovecharon los huecos que el buen juego de carrera les proporcionaba. T.J. Yeldon salió lesionado del campo, pero con 11 carreras conseguía 62 yardas. Denard Robinson tomó los mandos del backfield y con 14 carreras consiguió 75 yardas y una anotación. Blake Bortles también anotó de carrera y completó 16 de los 30 pases que lanzó para 250 yardas y tres touchdowns. Jugaron a placer, no tuvieron piedad y se hicieron con una victoria fácil que los mantiene matemáticamente vivos.

¿Qué falló en los Colts? El resultado lo dice todo. Más allá del buen partido que pudieran jugar los Jaguars, los de la herradura se dejaron ganar en todos los aspectos del juego. Defensa, ataque, equipos especiales y cuerpo técnico colapsaron en la peor actuación desde que Chuck Pagano fuera nombrado entrenador principal, allá por 2012.

Las lesiones están haciendo mucho daño, pero también la mala ejecución, la falta de energía y la toma de malas decisiones tanto por parte de los jugadores como del entrenador y sus coordinadores. Después de una primera parte impecable, la defensa implosionó y se dejó vencer sin remedio. El ataque no lo hizo mejor. 42 puntos sin contestación en la segunda mitad del partido hablan muy mal de ambas unidades. Tras las cuatro victorias que ha cosechado Hasselbeck llegamos a pensar en algún momento que, después de todo, si el equipo podía ganar sin su QB franquicia era porque se habían hecho las cosas bien. Tras las últimas dos derrotas y los síntomas que muestra el juego, da la sensación de que no se ha hecho nada bien.

Parece que en tiempos de desastre algunos tendemos a pedir explicaciones. Es fácil ser un general manager de sofá, y arreglarlo todo a base de imaginación, poco conocimiento real y fantasía teñida de Madden; pero lo cierto es que no hace falta ser muy agudo para darse cuenta de que algo falla terriblemente en estos Colts. En sus mismos cimientos. Decían en uno de los medios americanos que seguimos semana a semana que la respuesta a la pregunta ¿quién tiene la culpa? era sencillamente: .

La próxima jornada los Colts reciben en casa a los Texans en el duelo que probablemente decida la temporada de la AFC Sur. Ya hay quién dice que la victoria de los Patriots sobre nuestros amigos de Houston es un flaco favor a largo plazo. Razones no les faltan. Que los Colts no jueguen los playoffs les daría una mejor posición en el draft. Además, haría más evidente, si cabe, que es tiempo de cambios y que ya es hora de que soplen nuevos aires en Indianápolis. El caso es que por mucho que comprendamos estos argumentos, e incluso en nuestros momentos más pesimistas los compartamos, no podemos dejar de querer ver a nuestros Colts dándolo todo en enero.






Fotografía: Logan Bowles.

4 comentarios:

  1. EL partido termino 16-51, pero ese gol de campo la verdad no cambia nada... Esto que voy a decir no es sencillo de digerir, pero ayer me dio la sensación que estos jugadores no quieren jugar para su staff técnico... Lo mejor que nos puede pasar es no acceder a Play Off y que el GM (Grigson o quien sea que lo remplace) le saque mejor el jugo al Draft...
    Y puestos a soñar, al que quiero en el banquillo es a Jim Harbaugh...

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    1. El cambio de aires es algo inevitable. A mí tampoco me importaría ver a Jim Harbaugh a los mandos y con Grigson fuera.

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  2. Y tienes alguna idea para GM... a mi no se me ocurre nadie...y creo que Grigson suma aciertos y errores casi 50/50... EN su momento Irsay hizo una apuesta fuerte por Polian (y salió muy bien)... deberá hacer lo mismo ahora? por quien debería ir? se puede tentar a Ozzie Newsome? a Schneider? A Scott Pioli? o ascender de director de personal u otro cargo a alguién con menos experiencia como hizo Irsay con Grigson??

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  3. A mí tampoco se me ocurre nadie. Mis conocimientos son limitados y la verdad es que no podría decir un nombre. Lo que sí que creo tener claro es que si Grigson no termina en la calle, al menos debería ver muy mermado su poder. Creo que su ansia de tomar todas las decisiones ha sido una de las razones del fracaso de la franquicia.

    Para mi gusto, un buen GM sería aquel que no interfiriera con las decisiones deportivas más que lo realmente imprescindible, con buen ojo para el draft y capacidad para exprimir al máximo el salary cap.

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